Diseñados para usarse como sistemas cerrados. Aptos para almacenamiento, la distribución y mezcla aséptica de reactivos. Los biotanques cerrados son no metálicos, están fabricados con polipropileno y cumplen con las especificaciones 21CFR177.1520 y USP VI. Los tanques de polipropileno pueden esterilizarse en el autoclave. Los tanques tienen una apertura del cuello de 150 mm con un tapón con junta para obtener un sellado seguro